Objetivo: mostrar resultados preliminares del tratamiento quirúrgico de tumores hipofisiarios productores de la hormona del crecimiento, mediante abordaje de mínima invasión, con abordaje al seno esfenoidal vía transnasal endoscópica. Material y métodos: se analizaron un total de 14 pacientes operados desde el 2004, a la fecha en el INNN por el mismo neurocirujano mediante el mismo abordaje ya descrito. Se evaluaron en el pre y posoperatorio el volumen tumoral mediante RM, extensión e invasión tumoral mediante la clasificación de HardyVezina y la afección al seno cavernoso mediante la clasificación de Knosp. Se realizó valoración oftalmológica de campos visuales pre y posoperatorio. Se realizó perfil hormonal completo con especial interés en los valores totales de IGF-1 y HG (hormona de crecimiento) pre y posquirúrgico. Se revisaron las complicaciones presentadas. La acromegalia es causada por una secreción excesiva de hormona de crecimiento. La incidencia anual promedio de acromegalia es aproximadamente 3.3 por millón y la prevalencia es aproximadamente de 60 por millón. Los adenomas que secretan GH representan el 20% de todos los adenomas y aproximadamente el 75% de los adenomas productores de GH son macroadenomas. La mortalidad de la acromegalia no tratada es dos a tres veces mayor que la población general, pero con la reducción apropiada de la hiperproducción de GH, ésta se normaliza. La prueba definitiva para la acromegalia es un test de glucosa oral (OGTT) en el cual la glucosa sanguinea y los niveles de GH son medidos cada 30 minutos por 2 horas. La faita de disminución del nivel de GH a menos de 1 ng/ml es diagnóstico de acromegalia. Este test se realiza en periodo posoperatorio para evaluar si la resección fue completa y si hay necesidad de terapia adicional. La adenomectomia transesfenoidal realizada por un neurocirujano experimentado es un procedimiento seguro y representa el tratamiento de primera elección para la mayoría de pacientes con acromegalia. En un estudio de 103 pacientes, con un período de seguimiento de uno a 30 años después de la cirugía transesfenoidal, el 54% lograron remisión bioquímica a largo plazo (> de 10 años) usando los criterios antiguos de una muestra de GH al azar de < 2.5 μg/L o nadir de GH luego de OGn < 2.5 μg/L e IGF-1 normal. La neuroendoscopía fue implementada un siglo atrás para la cirugía de los plexos coroides en pacientes con hidrocefalia; su evolución fue discreta con reportes esporádicos en la literatura. Aunque Guiot, et al, fueron los primeros en reportar el uso de un endoscopio en una cirugia sublabial transesfenoidal en 1963, su uso común se da con el desarrollo del equipamiento neuroendoscópico disponible comercialmente en los últimos años. El uso inicial del endoscopio en cirugía sinunasal se dio en Europa tres décadas atrás y en Estados Unidos de Norteamérica hace dos décadas. Rápidamente reemplazó a la cirugía sinusal convencional por ser más funcional, incorporándose al abordaje transesfenoidal, en un inicio para biopsias simples de lesiones en la región selar, hasta su utilidad como asistencia a la técnica quirúrgica microscópica y como cirugía endoscópica sola, ya que facilita el uso de una ruta endonasal en cirugía hipofisaria. El abordaje endonasal fue reportado por primera vez por Hirsch en 1909, quién efectuó su primera cirugía en Viena al alcanzar la región sillar en varios tiempos.… [ABSTRACT FROM AUTHOR]