El concepto de accidente de trabajo, y aún más el de enfermedad profesional, no designan realidades que se impongan invariablemente por su sola denominación. El reconocimiento de un "nexo" entre trabajo y enfermedadese ocasión o por consecuencia del trabajo", una muestra de un millar de sentencias judiciales, repartidas entre 1936 y 1983, comprueba el peso de inercias estructurales y se detiene en los signos de inflexión, en función de la evolución de la legislación de referencia, pero también de sus interpretaciones por los tribunales y de su contexto. Como expresión normalizada de hechos sociales (los riesgos del trabajo para la salud de quienes lo realizan), el "riesgo profesional" es un objeto en construcción, en un proceso más contradictorio que lineal. [ABSTRACT FROM AUTHOR]