En la actualidad resulta evidente la existencia de una estrecha interrelación entre los procesos de desarrollo de la cultura, los consumos y las dinámicas urbanas. En un escenario de intensas relaciones sociales, como lo es la ciudad de Santiago de Cuba, al ser los espacios preferentes de localización, están adquiriendo una relevancia en los estudios del consumo cultural, con ópticas diversas y entramados gnoseológicos plurales. El objetivo del presente artículo está dirigido a la realización de valoraciones acerca de la emergencia de segmentos de la sociedad santiaguera, principalmente compuestos por jóvenes, que apuntan a la presencia de una clase ociosa, no productiva asociada a los consumos. [ABSTRACT FROM AUTHOR]