Resumen: Antecedentes: Cuando los intervalos entre fuegos son menores que el tiempo requerido por las plantas para reproducirse, las poblaciones son amenazadas por el “riesgo de inmadurez”. Por lo tanto, el entender como el tiempo entre fuegos influencia la vida de las plantas, nos puede brindar información sobre el manejo de ecosistemas. La cuantificación del período de “riesgo de inmadurez” requiere investigar la influencia de los intervalos de fuego sobre los estadios de vida de las plantas, aunque la mayoría de los estudios no discriminan sobre su estado de madurez. Como los regímenes de fuego son multidimensionales, es también importante considerar otras características de los fuegos, como su severidad. Condujimos un estudio de campo en un bosque de brezos que investigó cómo la severidad del fuego y el intervalo entre fuegos influencian el riesgo de inmadurez en especies serótinas, examinando si la severidad del fuego interactúa con el tiempo entre fuegos para influenciar la aparición u ocurrencia de individuos maduros y su abundancia relativa en tres especies: banksia plateada (Banksia marginata Cav.), prickly teatree (Leptospermum continentale Joy Thomps), y heath teatree (Leptospermum myrsinoides Schitdl).Resultados: Los modelos de regresión revelaron una muy fuerte y positiva influencia del tiempo entre el ultimo fuego en la proporción de parcelas en un sitio con plantas maduras, para todas estas especies. Detectamos solo una pequeña e incierta influencia de la severidad del fuego en la proporción de parcelas con plantas maduras de heath y prickly teatree, y no observamos un efecto de la severidad del fuego en la madurez de banksia plateada. De manera interesante, ninguna relación fue observada entre el tiempo desde el último fuego y la abundancia relativa de estas plantas. Esto significa que sólo cuando los estadios de vida de las plantas fueron considerados, detectamos un efecto del fuego sobre las plantas. La mayoría de las poblaciones de las tres especies consideradas estaban inmaduras en los siete primeros años del post-fuego, sugiriendo que si los sitios fuesen quemados de manera uniforme en este tipo de esquema, podría incrementarse el riesgo de extinciones locales.Conclusiones: Nuestro estudio enfatiza la importancia de examinar los procesos a nivel poblacional, como la reproducción, de manera adicional a la abundancia relativa de las plantas. Sorprendentemente, no detectamos diferencias marcadas en maduración de las plantas entre diferentes clases de severidad; la baja ocurrencia de plantas maduras en áreas quemadas recientemente indica que el riesgo de inmadurez es alto independientemente de la severidad del fuego. Los estudios ecológicos que distinguen entre distintos estadios de vida de las plantas ayudan a predecir los impactos del fuego en poblaciones y ayudan a mejorar los procesos de decisión. Recomendamos intervalos de ≥ 8 años para proteger las plantas serótinas en bosques de brezos de Australia.