La miomectomía por laparotomía es una intervención aún frecuente en la actualidad. El estudio preoperatorio permite obtener una cartografía precisa de los fibromas uterinos, corregir una posible anemia y evaluar la fertilidad si se quiere tener hijos. Los análogos de la hormona liberadora de hormona luteinizante (LH-RH) permiten disminuir el volumen de los fibromas en la etapa preoperatoria. El lugar de la embolización preoperatoria se ha evaluado insuficientemente. Diversas maniobras peroperatorias, como la oclusión de las arterias uterinas o la técnica del torniquete, disminuyen el riesgo hemorrágico. La principal complicación a largo plazo es la aparición de adherencias.