Durante la Conferencia de Estocolmo se logró evidenciar la preocupación geopolítica por la conservación y mejora del medio ambiente, siendo vital el fomento a las áreas protegidas y la incorporación de estrategias que permitieran reducir el impacto antrópico en los ecosistemas. En Colombia, gracias a la Ley 99 de 1993, se establecieron las áreas de protección del país, que juegan un papel fundamental para salvaguardar la biodiversidad. Los Distritos regionales de manejo integrado-DRMI pueden resultar ineficientes cuando los Planes de Manejo Integral no cumplen los objetivos de conservación que sustentan la respectiva declaratoria. Para evaluar la efectividad del DRMI Las Camelias se realizó un análisis espacio temporal de la pérdida del bosque desde 1991 hasta el 2020, se determinaron los focos de deforestación a través del cálculo de la matriz de Pontius y las métricas del paisaje de los parches boscosos, entre 2016 y 2020. Se encontró una tendencia de estabilidad y ganancia del bosque durante los años de estudio, concentrándose las pérdidas en intervenciones pequeñas. En la zona catalogada como de uso público hay una mayor intensidad de focos de deforestación, los cuales siguen un patrón agregado. Se determinó que los aumentos del bosque están asociados a pequeños fragmentos, sin embargo, la conectividad entre parches boscosos si está siendo afectada. Las pérdidas y fragmentación de las coberturas boscosas están asociadas al reinicio de actividades agropecuarias, que habían sido abandonadas por el conflicto armado, y las ganancias sectorizadas del bosque están ligadas a los diferentes procesos de desplazamiento y a las iniciativas de conservación por parte de CORNARE, las alcaldías y particulares. El presente proyecto se desarrolló con el apoyo de todos los integrantes del semillero SAGEMA, como ganadores de la "Convocatoria de Semilleros de Investigación, Creación o Innovación en la Universidad Nacional de Colombia, sede Medellín - 2021". [ABSTRACT FROM AUTHOR]